Frente a las políticas de ajuste del gobierno nacional que desfinancian salud y educación, Misiones consolida su propio modelo de gestión con una defensa férrea de lo público. El candidato Oscar Herrera Ahuad emerge como la voz del interior para el Congreso, respaldado por una batería de programas provinciales activos que palian la crisis, mientras la Renovación gobernante alinea su gestión ejecutiva con un reclamo legislativo de «dignidad política», trazando un rumbo alternativo al del oficialismo nacional, según entienden los analistas del espacio.

Domingo 21 de septiembre de 2025. Analizar la coyuntura desde Misiones implica observar un fenómeno político distintivo. Mientras el gobierno nacional navega en un mar de fracasos y desencanto, los espacios provinciales como el Frente Renovador misionero refuerzan su impronta como formas de gobierno alternativas. En ese sentido, los analistas políticos de la renovación rescatan la poítica local como sinónimo de movimiento constante, con una agenda propia y con una gestión que, aseguran, está vinculada a la defensa férrea de lo público.
Un acto de esta posición se desprende de Oscar Herrera Ahuad, candidato a diputado nacional que alzó la voz para marcar la cancha, con su llamado a rechazar el veto presidencial que desfinanciaba universidades y al Hospital Garrahan -el pediátrico de referencia de la región- que desde un posicionamiento coyuntural se convirtió en la reafirmación de un principio: la salud y la educación son pilares no negociables. “No me imagino una Misiones sin la UNaM”, declaró, conectando la memoria de las conquistas pasadas con la responsabilidad de protegerlas en el presente. Herrera habló como candidato, médico y exgobernador, legitimando un perfil que se postula para ser la voz firme de Misiones en un Congreso nacional distante de las urgencias del interior y, sobre todo, vaciado de política y debates sobre las necesidades de una población que atraviesa una crisis económica brutal, producto de la política neoliberal del presidente de la extrema derecha, Javier Milei.
Este reclamo tuvo respuesta de los diputados nacionales por el oficialismo misionero, que votaron en bloque contra los vetos y que mereció, en sintonía, el agradecimiento público del gobernador Hugo Passalacqua que celebró la decisión que confirma el rumbo misionerista, al que destacó como un gesto de “dignidad política”.
Desde las filas internas, enfatizaron en ese sentido que la Renovación gobierna para la gente, en una sintonía que potencia el reclamo legislativo y la gestión ejecutiva. También enfatizaron que la Renovación no vive solo de la reacción a los desaciertos nacionales sino que, atentos a la crisis, la provincia desplegó una gestión activa y de cercanía con programas como “Ahora Inter PyMEs” y “Ahora Remedios” son ejemplos de una creatividad aplicada a paliar esta situación económica. «Son medidas concretas, de impacto directo en el comercio local y en el bolsillo de los jubilados, que hablan de una sensibilidad social ausente en la macroeconomía», según describen puertas adentro del oficialismo local.
Y enumeran: la misma lógica se vio en el Mercado Central de Misiones, con la inauguración de infraestructura clave para productores, y en Puerto Iguazú, donde Passalacqua defendió la autonomía del Ministerio Público como parte de la “infraestructura de la felicidad”. Se trata de una visión integral donde el desarrollo no es solo obra pública, sino también instituciones sólidas y seguridad jurídica.
Desde la Legislatura, la sanción de la ley de chacras multiproductivas –iniciativa de Carlos Rovira– consolida un modelo de desarrollo que mira al futuro, al promover la diversificación productiva, reducir la dependencia de agroquímicos y integrar tecnología. Así, Misiones consolida un sendero propio, vinculando educación, innovación y producción sustentable.
En perspectiva, la semana mostró un tablero ordenado para el espacio gobernante, donde Herrera Ahuad se consolida como el defensor de Misiones en la arena nacional, en un escenario de políticas que fracasan en manos de los ultralibertarios.

El candidato
En campaña por Misiones, Herrera Ahuad deja un mensaje de defensa federal y Estado presente. Desde Oberá, esta semana que pasó, desplegó los ejes centrales de su campaña con compromiso con los adultos mayores, con la defensa de la educación pública y del Estado presente. Las actividades buscaron consolidar su perfil como el representante que llevará las demandas de “el millón y medio de misioneros” al Congreso Nacional.
Frente a los adultos mayores, Herrera Ahuad se presentó como un aliado histórico: «Siempre he estado al lado de los clubes de abuelos», recordó, para luego trazar un compromiso concreto: “No me veo en el Congreso sentado sin tomar una decisión para mejorar su vida”.
Con un discurso directo, enumeró las luchas que planea llevar a la arena nacional: la mejora del PAMI, el acceso a sillas de ruedas, pañales y medicamentos. “Tenemos que pelear para que eso llegue”, afirmó, poniendo el foco en la necesidad de una política integral para la tercera edad. Su postura se tiñó de una convicción personal al revelar: “Les digo yo, que soy una persona discapacitada. Yo tengo discapacidad auditiva. Entonces me duele mucho lo que pasó y tengo que llevar la voz de ellos”.
También fue claro al diferenciar su posible gestión de la confrontación vacía. “La Argentina necesita que estemos con propuestas. No necesitamos más la desacreditación”, sostuvo para recordar su lealtad con la provincia: “Yo voy a pedir el precio de la yerba porque los productores necesitan acomodar su economía”. Aclaró que su postura no es “en contra del Presidente”, sino a favor de los sectores productivos y las universidades de Misiones.
Apelando a su trayectoria como médico, ministro, vicegobernador, gobernador y ahora legislador, Herrera Ahuad pidió confianza: “Quiero que me defiendan y me cuiden, porque tengo mucho para dar”.
Después, en un acto de colación del Sistema Provincial de Teleducación y Desarrollo (SiPTeD), cambió el registro para enarbolar la bandera de la educación pública. Frente a los graduados, definió al título como “sagrado” y al acto como “el resumen de las políticas públicas”.
En un mensaje frente al debate nacional sobre el papel del Estado, Herrera Ahuad se pronunció a favor de un Estado activo: “Si el Estado no está presente, no hay educación, no hay salud, no hay desarrollo”. Para él, la salud y la universidad pública no son un gasto, sino “la inversión más maravillosa que puede hacer un Estado, porque significa inclusión”.
Respecto a su papel en el Congreso, anticipó que la discución “no va a ser sencilla” y pidió el respaldo de la población en las urnas el 26 de octubre, cuando se eligen diputados nacionales.