Misiones Plural

La coordinación del Ministerio del Interior con la Provincia no se convertirá en un “gobierno paralelo” afirmó Alfredo Schiavoni. “Es un imperativo categórico”, afirmó a este sitio que lo indagó sobre los antecedentes históricos como el de Cacho Barrios Arrechea que armó una estructura casi de intervención durante los dos primeros años del gobierno de Julio Humada en 1987/89. El cargo obliga hoy al diputado del PRO a un difícil equilibrio entre sus convicciones y el respeto a la soberanía popular y las decisiones del gobierno de la provincia.

Posadas. (Martes 10 de mayo) El diputado del PRO, Alfredo Schiavoni no la tiene fácil. El cargo de “Coordinador del Ministerio Del Interior de la nación para la provincia de Misiones” lo obliga a un permanente equilibrio. Tanto político como institucional.

Como explica el mismo Schiavoni,  las coordinaciones, que entre paréntesis son ad honorem, se establecieron en todos los distritos con el propósito de “articular las relaciones del gobierno nacional con las provincias”.

Estas coordinaciones formalizaron su existencia en la segunda quincena de abril cuando se realizó la primera reunión plenaria de coordinadores nacionales en el Salón de los Escudos de la casa Rosada. El diputado reveló en su Facebook que participaron todos los representantes nacionales, además del vice ministro del Interior Sebastián García De Luca, acompañado de varios secretarios de Estado de los diferentes ministerios del gabinete de Mauricio Macri. Se acordaron prioridades en materia de obras públicas, sobre todo en lo referente a viviendas y rutas. Los coordinadores nacionales expusieron la realidad de cada una de sus provincias a los efectos de priorizar las acciones del gobierno nacional de acuerdo a este diagnóstico.

Esta facultad que el Ejecutivo Nacional le concede a un “coordinador” que no es de la fuerza política que gobierna la provincia no es clara institucionalmente ya que se mueve en los límites de las atribuciones jurisdiccionales. ¿Quién define las prioridades de inversión en las provincias? Pregunta que marca el primer equilibrio que debe hacer Schiavoni en su práctica política. Se da por supuesto que un dirigente de su nivel se mueve en función de su propia cosmovisión de los problemas, pero al mismo tiempo debe respetar las directrices del Ejecutivo provincial.

Por otra parte, existen antecedentes históricos, bastante recientes en Misiones para sospechar de la figuras como la del “coordinador entre la Nación y la Provincia”

El más recordado fue el gobierno paralelo que le armó, entre 1987 y 1989, desde el Ministerio de Salud y Acción Social de la nación, Cacho Barrios Arrechea a Julio Humada que gobernaba en la provincia.  En forma arbitraria estableció mecanismos para que todos los recursos de la Nación llegasen a la provincia a través de “coordinadores” que, por supuesto eran todos de la UCR. El manejo discrecional de las Cajas PAN es el más recordado. La misma utilización partidista tuvo lugar entre 1999 y 2001, cuando los radicales desembarcaron en la EBY para financiar el clientelismo político. De esos años datan las turbias relaciones con las organizaciones barriales y de afectados, que establecieron lazos y entramados de complejidades muy difícil de desatar.

Imperativo categórico

A casi un mes de asumir el cargo de coordinador, el  diputado Schiavoni, armó una agenda que desalienta esas sospechas, digamos históricas, del tipo el que se quemó con leche ve una vaca y llora.

Por el contrario, recorre el territorio provincial y se reúne con sectores sociales para escuchar demandas y problemas con soluciones que hasta ahora no puentean al gobierno provincial ni a los municipios.

Se puede afirmar que no mezcla las cosas con las reuniones de tinte partidario, aunque sigue siendo duro opositor a uno de los ejes de la doctrina de la Renovación como  la política fiscal y alienta a la vez la reforma electoral y la eliminación de la ley de lemas.  Pero no cabe que promueva inversiones en obras públicas o se sume a reclamos por el ITC y la tarifa de electricidad diferenciados, por el precio de la hoja verde y el combate contra el dengue.

Tan difícil la tiene que al revés de los esperado, ese comportamiento de respeto a la soberanía de los misioneros  lo obliga a explicar y a hacer docencia al interior del PRO y de Cambiemos ya que, sus socios del ucerreísmo tienen un hambre que no queda disimulada ni bajo su retórica republicanista.

Nuestros periodistas lo indagaron sobre el tema poniendo sobre la mesa la memoria de lo sucedido con la conformación de “gobiernos paralelos”. “Es un imperativo, un imperativo categórico, de que eso no está en los fundamentos de la creación de las coordinaciones”. Con lo de  imperativo hace referencia a una decisión de orden para la acción de coordinador, que no puede ejercer en forma disociada de su rol de diputado del PRO, pero puede encuadrar en las relaciones institucionales que tienen en Macri y Rovira referentes insoslayables. Categórico porque es una condición incondicional.

Esta decisión, que lo mantiene haciendo un fino equilibrio, si se mantiene en el año electoral estará poniendo de manifiesto un avance concreto en el proceso democrático de Misiones.