“Somos una provincia pequeña con muchos agricultores. Más de 27 mil familias constituyen nuestra gran fortaleza. Se hizo mucho y se hizo bien; hoy, para cuidar la biodiversidad, también es importante comprar acá, sin que los alimentos viajen tantos kilómetros. Comprar alimentos de chacras misioneras y entender que las familias agricultoras vienen cuidando sostenidamente nuestro ambiente, nuestra naturaleza, nuestro paisaje y jamás han visto una compensación”, plantea la ministra de Agricultura Familiar, Marta Ferreira, en Plural TV, de Canal Cuatro Posadas.

Jueves 28 de octubre de 2021. La mirada puesta en la soberanía alimentaria alienta a la ministra del Agricultura Familiar, Marta Ferreira, a insistir con la producción de alimentos para los misioneros, aunque el objetivo está, todavía, bastante lejos. “Me gustaría poder verla concretada en breve, pero faltan unos años. Lo importante es que estamos en camino, logrando pequeños pasos; pero así son las conquistas: pequeñas acciones todos los días hacen la diferencia”, dispara en una entrevista en Plural TV, por Canal Cuatro Posadas.
En el universo provincial, más de 27 mil familias agricultoras diversificaron mucho desde pequeñas superficies. Pero hace falta cantidad para abastecer las necesidades alimentarias de los misioneros. En el mientras tanto, destacan la fortaleza de esa diversificación en un trabajo donde buscan potenciar la producción en las áreas ya afectadas a esa economía, en resguardo de la frontera ecológica: no avanzar sobre las áreas verdes sino producir más en las áreas del agro.
La alimentación sana y la recuperación de los hábitos alimenticios saludables incidirá en la mejor calidad de vida de los misioneros: esa también es la línea de trabajo desde Agricultura Familiar, según explicó la funcionaria en la entrevista de Plural TV.

La entrevista

-Misiones incentiva la producción de alimentos desde la agricultura familiar…
-Estamos contentos porque los temas que venimos trabajando hace mucho, como alimento, soberanía alimentaria, producción de alimentos sanos, están prendiendo en la sociedad. Vemos que el consumidor, el ciudadano misionero se vuelca más a las ferias, al mercado concentrador, a los mercados de la soberanía alimentaria.

-¿Van creciendo esos mercados?
-Así es, también van creciendo los consumidores que buscan esos mercados. Cuando hacemos algún evento en las plazas no queda nada. Y el posadeño especialmente nos pregunta: ¿vuelven mañana, van a estar la semana que viene? Es decir que hay búsqueda, y este contexto de pandemia reforzó mucho esto de “compremos cerca”, y los riesgos de que si no ingresa mercadería de afuera tenemos que abastecernos con lo que tenemos. La alimentación saludable también es clave como agricultura familiar, pero también es un enfoque que tiene el gobierno de Oscar Herrera Ahuad. Somos conscientes de que tenemos que trabajar los hábitos de alimentación de la sociedad misionera, porque queremos que sean ciudadanos capaces de asumir los roles que les toque en la sociedad, y para eso hay que gozar de buena salud.

-¿Hay que cambiar los hábitos alimentarios?
-Así es, si miramos nuestras familias vemos que se dejó de lado el desayuno. Es muy importante desayunar bien, ingerir comida variada, muchas verduras, muchas frutas, mucha agua; hacer actividad física, que también empezamos a introducir en el ámbito de mujeres rurales. De hecho, hay actividades con mujeres rurales, que empiezan a hacer más actividad física, que también es un derecho: la recreación, el esparcimiento; la actividad física es un derecho para las mujeres, que empiezan a hacer ejercicios para mejorar su calidad de vida. Hacer actividad física es salud. Vuelvo a decir eso de que estamos satisfechos porque la sociedad ha entendido que los misioneros podemos autoabastecernos, que podemos lograr la soberanía alimentaria, y que la misma depende de las acciones de cada uno. Qué puedo plantar en mi patio, en mi balcón, en mi plantera. Y eso se está dando. Cada vez que entregamos plantines o semillas en la ciudad capital, vienen todos los vecinos a buscar porque quieren sembrar; en los barrios nos piden charlas de huertas, en las escuelas nos piden charlas de huertas. En el Instituto Montoya hicimos capacitaciones que cierran esta semana. Vinieron 50 alumnos y de los 50 solo tres abandonaron. Y vamos a continuar el año que viene con esa institución. Después hay otras instituciones como el colegio de Roca, un colegio privado, en el Instituto Espíritu Santo de Leandro Alem, donde estuve hace poco, también quieren trabajar una huerta el año que viene. Algo que también tiene un enfoque de trabajo a la comunidad. Es muy bueno que las escuelas empiecen a abrirse a la comunidad con estos servicios.

-¿Cómo podemos graficar todo esto, qué cantidad de productores hay, cuántos quilos se producen de qué alimentos, cuál es nuestra principal producción, cuál es nuestra principal carencia?
-Al tener nosotros más de 27 mil familias agricultoras que en pequeñas superficies han diversificado mucho, uno puede encontrar una chacrita de dos o tres hectáreas que tiene más de 25, 30 variedades de productos. Eso, desde una mirada es una fortaleza, puede que sea una debilidad porque no puede hacer volumen, hace un poquito de cada cosa.

-No puede satisfacer una gran demanda…
-Así es. Nos pasa mucho con las frutas nativas, cuando viene alguien de afuera y dice quiero 10 mil paquetes o frascos de esa fruta, no es posible. Lo nuestro es pequeño, y creo que debemos ponerle valor también a eso. Es de temporada, es escaso. Hay que ponerle valor también a que sea escaso, porque es la realidad de nuestros agricultores y de la provincia. Somos una provincia pequeña con muchos agricultores. Más de 27 mil familias constituyen la gran fortaleza que tiene nuestra provincia, y creo que las políticas que se vienen generando desde hace mucho tiempo tienen mucha coherencia, mucho de que solo los hechos dan fe a las palabras, porque se fueron generando muchas políticas para el sector, y hoy lo que le estamos diciendo a la comunidad es que si quiero cuidar mi biodiversidad, la biodiversidad de mi provincia, tengo que comprar alimentos que viajen menos kilómetros, entonces tengo que comprar alimentos de chacras misioneras, que no hagan tantos kilómetros. Y a la vez entender que estas más de 27 mil familias agricultoras vienen cuidando sostenidamente nuestro ambiente, nuestra naturaleza, nuestro paisaje, y jamás han visto una compensación. Y de eso hay mucha historia, porque cuando los visitamos, el agricultor reclama, dice: “yo tengo este pedacito, dejé esta media hectárea, es un bosque que no lo voy a tocar”. Así que enhorabuena que hoy se ponga este planteo a la nación que ese cuidado tiene un costo. El productor se ha privado de muchísimas cosas por cuidar.

-Por no convertir en dinero ese pequeño reducto de monte nativo.
-Exacto, creo que los argentinos respiran gracias a nuestro pulmón. Entonces eso tiene un costo, que es lo que se está reclamando. Es un hecho histórico por el cual los agricultores se verían beneficiados. Nosotros tuvimos hace poco el Encuentro de la Mujer Rural, donde el enfoque que le pusimos es la mujer rural como cuidadora innata del planeta. Porque tiene que ver con esto, la familia que está en la chacra cuida el planeta, el paisaje, el agua, ese cuidado tiene un valor.

-¿Es también una tendencia internacional esa revalorización de la mujer en la producción de alimentos?
-Sí, no solo en la producción de alimentos, sino que en general. Lo que sí, nosotros queremos acentuar ese valor que, tal vez no siempre tenemos el tiempo y la oportunidad de ponerlo en su justa valoración. Reconocer así las múltiples tareas que hace la mujer rural misionera, y también su capacidad de liderazgo, de empoderamiento en su comunidad. En San Pedro hemos visto tantísimas colonias con mujeres líderes, con capacidad de hacer de todo, trabajo grupal, sin límites. Creo que tenemos mucho de eso en la provincia. Nuestra tarea es mostrarlas, visibilizarlas, contar sobre ellas, y que haya más empoderamiento de su parte para asumir más roles en la sociedad.

-Tenés bastantes logros de los cuales hablar, ¿qué te faltaría conseguir desde el ministerio de agricultura familiar?
-Nos falta, como a muchos, que la Nación nos mande más recursos al sector, nosotros presentamos muchos proyectos para agricultores familiares, programas que la Nación lanzó el año pasado, un año bastante particular, pero muy pocos programas fueron aprobados y fue hecho el desembolso. Programas muy bonitos que se han presentado, pero no han llegado. Nosotros nos movimos todo este tiempo con recursos propios, de la provincia. Así que creemos que la agricultura familiar misionera tiene que ser revalorizada en este reclamo por la compensación. La agricultura familiar misionera, esa cantidad de familias que son tan importantes, necesitan de más recursos. El agricultor familiar hoy, necesita de mucho acompañamiento del Estado, mucha capacitación con todas estas cuestiones nuevas que se vienen. Desde el comercio electrónico, pero también desde todas las nueva prácticas agrícolas que estamos realizando con agroecología, con agricultura sintrópica, y todas las nuevas agriculturas que aparecen para cuidar el ambiente. Además de eso, se necesitan insumos, tecnología, y nosotros vamos acompañando varios procesos. Aquel que necesita herramientas básicas para comenzar de cero, y aquel otro que ya le agregó valor, que ya empezó con su tienda virtual, es decir, acompañar a todos. Hay una diversidad de situaciones que estamos atendiendo, a veces no pudiendo resolver de manera inmediata tantísimas demandas. Pero como nos dice el gobernador, estar ahí con el agricultor, el consejo técnico, la transferencia de conocimientos también es un valor, también tiene un costo, y el agricultor lo está valorando. Porque a veces, cuando vamos el agricultor no nos pide nada, pero sí un consejo técnico para no cometer errores, para que el cultivo no tenga problemas. Detalles que los profesionales saben y los transfieren. Nos faltan más recursos para resolver esas demandas. Tenemos mucha esperanza de que los tiempos que vienen serán mejores, entonces vamos a poder atender al universo de agricultores familiares que producen cada vez más en familia, y donde también están emergiendo los jóvenes agricultores.

-¿Están llevando adelante el comercio electrónico?
-Sí, hemos hecho capacitaciones con Silicon, Agrojusto, de 40 agricultores hay dos que ya tienen su tienda virtual, Gastón Jacobi y Silvina Sanabria. Uno puede decir “qué poco”, pero para el sector es importante y a nosotros nos alegra. Lo mismo que el “Ahora Feria”. Alguno podrá decir “tan poco”, pero es inclusión financiera que se está dando ahora, y el productor está entendiendo. Hay que ir más lento nada más, explicar más veces. Hicimos muchas capacitaciones con el Ministerio de Hacienda, con el Banco Macro, con ATM. Aunque haga falta explicarlo varias veces, vamos y lo hacemos, porque cuando el productor lo entiende, y ve que sus compañeros lo están haciendo, empieza.

-¿Es posible la soberanía alimentaria misionera?
-Me gustaría poder verla concretada en breve, pero faltan unos años. Lo importante es que estamos en camino, y que se van logrando pequeños pasos, pero así son las conquistas, pequeñas acciones todos los días hacen la diferencia.