Los misioneros la tenemos fácil para votar en defensa de los derechos de las mayorías y no caer en las manipulaciones para terminar votando por nuestros propios verdugos. El método es pensar la política desde lo que se juega en la economía yerbatera. Por un lado la defensa de los productores medianos y pequeños, la agricultura con agricultores, por el otro los grandes pulpos que defienden la concentración del ingreso y con el argumento de que son ineficientes quedarse hasta con la propiedad de las chacras. La ofensiva enmascarada en palabras como desregulación mencionada por los porteños de JxC es financiada por Las Marías según denunció Página 12 y tiene la complicidad del PRO y la UCR de Misiones. El papelón de Rodríguez Larreta que atacó el esquema fiscal de Misiones que fue copiado por Jujuy, gobernada por su compañero de fórmula. El gobernador electo de Córdoba insistió que son «pítuquitos de Recoleta» que no entienden nada de lo que sucede fuera de Buenos Aires.

Viernes 11 de agosto de 2023. Las propuestas políticas para el desarrollo de la economía de la yerba mate sirven de anclaje en la realidad. Puede ayudar a los misioneros a definir racionalmente su voto el domingo. Nada más concreto y tangible para pensar la política desde los derechos e intereses de cada sector. Un método sencillo para desnudar de sus adornos a las palabras y las frases y jingles ingeniosos de campaña y sobreponerse a la manipulación de los medios nacionales y la acción psicológica.
Preguntarse ¿Qué se discute en la economía de la yerba? ¿Qué le conviene a Misiones?
Se juega nada menos que la defensa de 20 mil productores pequeños y medianos. La defensa además de la propiedad de sus chacras.
Volverlas inviables es lo que esconde el discurso de la eficiencia y la desregulación que agita fantasmas, como la intervención del Estado, la carga impositiva, y todo lo público.
La contracara es la economía de Corrientes.
Según datos de la Universidad Nacional del Nordeste, que ya publicamos, en Misiones, el 95,9% de las explotaciones agropecuarias son de hasta 100 hectáreas y ocupan el 49,9% de la superficie rural. En Corrientes sólo el 2,5% de los propietarios son dueños del 58,4% de la superficie.
Hilando fino, los terratenientes correntinos lejos están de ser eficientes. Largan las vacas a pastar yuyos naturales en largas extensiones. Se podría afirmar que hay una vaca por hectárea. ¿Eso es ser productivo?
Lo que vale es el fondo. Esta distribución de la tierra tan diferente genera forzosamente dos sociedades diferentes.
Es la propiedad de la tierra en Misiones la que garantiza una base objetiva para un sistema democrático y participativo. Opuestamente, el latifundismo correntino es más propio de esquemas feudales.
Y no es casual que la ofensiva por la desregulación, que como dijimos esconde una ofensiva sobre la propiedad de las chacras, tenga a como ideólogos a Las Marías y en las operaciones al gobernador Valdés y legisladores de Juntos por el Cambio de nuestra provincia.
En octubre pasado, cuando el gobernador de Corrientes llegó a la provincia en su embestida contra la resolución 170 del Inym que regulaba las nuevas plantaciones, advertíamos: La alianza de Arjol por la UCR de Misiones y Puerta con Valdés, sin dudas, está adelantando tiempos conflictivos. Ver acá.
Y llegaron esos tiempos.
El domingo pasado, en Página 12, Leandro Renou, denunció “El juego de los especuladores de la yerba mate”. Específicamente menciona a Las Marías. Y si bien su nota se refiere a las especulaciones con los precios para desestabilizar al gobierno nacional y fundamentalmente a dinamitar las posibilidades de Sergio Massa como candidato a presidente, hay un párrafo que abona tangencialmente la tesis de la ofensiva correntina sobre Misiones. Dice: “El caso de Las Marías es particular por dos razones: hace unos días, depositó 2 millones de pesos en la cuenta de campaña de Juntos por el Cambio, y hay más dinero de directivos particulares. Esos son los aportes formales”.
También Las Marías, aliado 40 años después a sus adversarios de los primeros años de la democracia, y socios en plantaciones en Paraguay, hace lobby para liberar las importaciones de yerba. Todo en nombre de la libertad, de ellos a costa de los productores misioneros.
Este es el contexto en el que el candidato de Juntos por el Cambio, Rodríguez Larreta desembarcó en Posadas. Asesorado por los misioneros, los del PRO y los de la UCR, se pronunció por terminar con las regulaciones y en consecuencia disolver el Inym.
“Hay que entrar con lupa, sector por sector para entender bien. El tema de la yerba, el tema del precio sostén, toda esa parafernalia de un Gobierno metiéndose: desregulación”, dijo el candidato porteño y a su lado los misioneros asentían con una sonrisa cómplice.
Después de la repercusión de sus palabras, oportunamente un candidato local intentó aclarar lo que estaba ya entendido. No es una novedad que desde Juntos por el Cambio se viene insistiendo en la inviabilidad de las pequeñas y medianas unidades productivas de Misiones. Con la lógica del poder dominante promueven mayor concentración y centralización del ingreso como ley natural de la economía capitalista.
¿Sabrá el porteño que llegó a Misiones amenazando con terminar con las chacras y el esquema de la agricultura con agricultores?
Decimos amenazando porque JxC no viene haciendo promesas en la campaña sino perpetrando amenazas contra derechos conquistados por los trabajadores en años de lucha.
No casualmente HRL perteneció al gobierno de la Alianza que generó la última gran crisis yerbatera en el país. Crisis que generó en el gobierno peronista de transición, la creación del Inym, en julio de 2022. ¿Sabrá el porteño que el Instituto fue el logro de años de tractorazos y gestiones para que el Congreso de la Nación sancionara la su creación?
Larreta había pasado antes por Corrientes donde prometió a Valdés el manejo de la Entidad Binacional Yacyretá. Otra vez asesorado por sus candidatos locales justificó el anuncio afirmando que es hora de compensar a la provincia por el costo de la formación del lago. ¿Sabrán en Buenos Aires que el Paraná no nace en las islas Apipé?

Haz lo que digo no lo que hago
El otro tema que no resiste análisis es el referido a la carga impositiva.
Larreta adhirió al discurso del PRO y la UCR de Misiones sobre los impuestos que cobra la provincia. Por supuesto amenazó con terminar con la “aduana interna” y discurrió sobre la Constitución y fallos de la Corte Suprema.
A su lado, impertérrito su compañero de fórmula se agarraba la cabeza. Gobierna todavía Jujuy, que aplica el mismo régimen de pago a cuenta del Impuesto sobre los Ingresos Brutos sobre el transporte de determinadas mercaderías desde, hacia o dentro de la provincia, por un valor entre un 1% y un 4% del valor de lo transportado.
Su propia gestión en CABA debería eximirlo de considerarse un justiciero. Larreta no es un observador de la ONU. Cuando el gobierno nacional derogó el decreto de Macri por el que se atribuyó un índice desproporcionado de coparticipación para compensar el gasto por la transferencia jurisdiccional de la Policía, el Jefe de Gobierno de CABA, para cumplir con las demandas de gastos presupuestados, decretó subas de impuestos como un 1,2% de alícuota para las compras con tarjetas de crédito o un incremento de 7 a 8% de Ingresos Brutos para las entidades financieras.
La necesidad tiene cara de hereje. ¿No cree el porteño que Misiones tiene necesidades que CABA no tiene? Nada dijo Larreta de la deuda histórica que la nación arrastra con Misiones desde que le recortó el 25% del índice de coparticipación federal.
Como vocero del poder real, los candidatos de JxC siempre cuestionan la carga impositiva, pero cuando les toca gobernar son pragmáticos.
La cuestión fiscal no sólo tiene una faz, sino que hay que medirla en función a los servicios que logra prestar el Estado. Para hablar de presión impositiva, no sólo alcanza con relacionarla con el PBI, sino también con la extensión y calidad de la Educación, la Salud, la Justicia y la Seguridad.
Es un mito que la Argentina tenga una carga alta. La presión tributaria de la Argentina en 2021 fue del 30,5%: 25,6% correspondiente a impuestos nacionales y 4,9% a tributos provinciales.
La carga está lejos de países como Dinamarca (46,6%), Francia (44,9%), Suecia (42,8%) y Bélgica (42,7%).

“Pituquitos” se quedan con los recursos
Este paso de HRL por Misiones explica la profunda significación del famoso “pituquitos de Recoleta” del intendente y gobernador electo de Córdoba.
Después de las repercusiones de sus declaraciones que afectaron directamente a los dos candidatos de JxC, porque tanto Bullrich como Larreta son porteños y de familias patricias, Martín Llaryora redobló la apuesta.
Aseguró que no quiso ser ofensivo, y que no se refirió a todos los porteños sino a “los dirigentes que se quedan con los recursos del interior y vienen a explicar cómo se gobierna”.
“Lo que les pido a los dirigentes porteños es que no se queden con el ‘pituquitos’, no se ofendan por eso y escuchen todo lo que dije. Son ustedes los que piensan el país desde Recoleta y no pueden seguir ofendiendo a todo el interior, porque hace décadas que se quedan con nuestros recursos y después nos vienen a explicar cómo se gobierna.
“Pituco es un término que uso siempre, se usa en mi familia. No quise ofender, me salió así. Fue un triunfo que nos desbordó, y habían sido meses soportando que vengan a explicarnos de transporte unos tipos a los que la Nación les administra el transporte y los tapa de subsidios; intentaron confundir a los cordobeses con el traspaso de la policía, los mismos a los que les pagamos miles de policías federales, a los que la Prefectura les cuida Puerto Madero y la Gendarmería les cuida los parques, no tolero esa discriminación al interior y no me banco más que esos mismos dirigentes vengan a Córdoba a decirnos que no sabemos administrar, que no sabemos gobernar, que ellos son los Maradona de la vida y los del interior somos todos tontos.
“Se quedan con la palabra ‘pituquitos’, pero yo hablé de cosas muy concretas: devuelvan al interior los recursos de las retenciones, liberen a todo el país los subsidios al transporte que se quedan en el Amba, repartan las fuerzas federales que están solo en Buenos Aires y piensen en la infraestructura que necesita todo el país. Pongamos equidad y después veamos quién administra mejor”.
También cuestionó que a menudo algún sector de la prensa porteña considere que en Córdoba el peronismo construyó un feudo. “Así ven todo, todo lo que está en el interior es un feudo o es atraso. Las provincias son feudales si la gente decide con su voto que continúe el mismo partido, pero en Caba eso está muy bien. Eso es lo que cuestiono cuando hablo del modo sesgado en que miran el interior”.

EV – Misiones Plural