Cerca de 1,7 millones de personas no consiguen trabajo. El Indec reveló que la desocupación trepó a 7,9% en el primer trimestre de 2025 y la precarización laboral se profundizó pese al crecimiento de la actividad.
Lunes 23 de junio de 2025 (Por Lorena Hak para Letra P). Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), la tasa de desocupación en Argentina ascendió al 7,9% en el primer trimestre de 2025, el peor registro de desempleo en más de tres años. De los datos oficiales se desprende que 1,7 millones de personas que buscan empleo no lo consiguen.
El incremento es significativo: el desempleo creció 1,5 puntos porcentuales respecto al cuarto trimestre de 2024, cuando se ubicó en 6,4%. También implica un aumento respecto al 7,7% del mismo período del año pasado.
Para encontrar una cifra más alta hay que remontarse al tercer trimestre de 2021, cuando el desempleo alcanzó el 8,2% en plena salida de la crisis sanitaria por la pandemia.
En simultáneo, el empleo cayó al 44,4% y la actividad se redujo al 48,2%, lo que confirma que una parte significativa de la población directamente dejó de buscar trabajo.
La fotografía que surge del informe es doblemente preocupante: hay más personas desocupadas y menos personas ocupadas, una combinación que evidencia el deterioro del mercado laboral, incluso en un contexto de rebote en variables como producción industrial, exportaciones o actividad financiera.
El informe del INDEC revela la precarización

Uno de los aspectos más delicados del informe del INDEC es el crecimiento de la precarización. La tasa de informalidad se mantuvo elevada: en el primer trimestre de 2025, el 42% de las personas ocupadas no tiene cobertura formal, una cifra que se mantiene por encima de los niveles pre pandemia.
Dentro de la población ocupada, el 72,7% son asalariados, pero de ellos, el 36,3% no cuenta con descuento jubilatorio, es decir, trabajan en la informalidad.
De estos asalariados informales, el 17,1% realiza aportes por su cuenta, lo que indica un intento de formalización parcial pero sin vínculo contractual.
El número de cuentapropistas también creció: el 23,5% de las personas ocupadas trabaja por cuenta propia. A esto se suman los trabajadores familiares no remunerados (0,4%) y la patronal (3,4%). En otras palabras, casi uno de cada tres trabajadores no depende de una relación asalariada clásica y enfrenta mayor inestabilidad laboral.
Informalidad estructural y fragmentación productiva
La precarización estructural también puede verse en que el 4,4% de las personas asalariadas utiliza sus propias maquinarias o equipos para trabajar, una práctica que suele asociarse con contrataciones sin vínculo formal, en la que el empleador no asume costos básicos de producción.
El 7,8% del total de ocupados trabajó desde la vivienda, lo que puede incluir tanto trabajos formales con acuerdos de teletrabajo como tareas informales y no registradas.
Asimismo, más del 54,5% de los ocupados se desempeñan en empleos operativos o no calificados, en los que suele concentrarse la informalidad y los menores ingresos.
Empresas que cierran, empleo que se destruye
Los datos aportados por el INDEC se complementan con el informe «Análisis de la dinámica laboral y empresarial», elaborado con información de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo.
En este estudio se observa una tendencia clara: entre noviembre de 2023 y marzo de 2025 se perdieron 13.862 empresas con empleados registrados y se destruyeron 210.971 puestos de trabajo formales, lo que equivale a una caída del 2,14% en el empleo privado registrado en unidades productivas.
Javier Milei y Toto Caputo diezman por goteo el empleo privado
(Por francisco Aristi para Letra P). Suspensiones, despidos y retiros por la caída del consumo y el dólar barato. Impacto en grandes industrias y pymes. El índice de desocupación, inamovible.
La industria nacional sigue con niveles de actividad deprimidos y amenazada por la apertura importadora y el dólar barato de Javier Milei y Toto Caputo, mientras surfea una crisis que diezma por goteo el empleo privado. Hay casos de empresas que despidieron trabajadores, pero este dato no impactará en el índice de desocupación que se publicará el 18 de junio.
«En el primer trimestre no veo una profundización de la crisis de empleo. Vamos a ver una continuidad con lo que se registró en el segundo semestre de 2024. Un mercado de fuerza de trabajo estancado sin mayores modificaciones. Tal vez esta dinámica tenga alguna novedad en el segundo trimestre, pero no está claro”, dijo Luis Campos, coordinador del Observatorio del Derecho Social de la CTA Autónoma.
En igual sentido, el especialista en mercado laboral Matías Ghidini detalló: “El mercado laboral está trabado, con mucha heterogeneidad sectorial».
«Hay que esperar procedimientos de crisis en sectores productivos comprometidos como el comercio, la venta minorista, el consumo, la gastronomía, la hotelería y el turismo. Ahí se pueden encontrar desvinculaciones, sobre todo en empresas que no han logrado reformar su modelo de negocios”, advirtió.
La UIA y el costo argentino
La última información que publicó el Centro de Estudios de la CTA-Cifra indica que entre noviembre de 2023 y febrero de 2025, el número de asalariados registrados se redujo en casi 182.000. Es una caída neta de más de 108.000 trabajadores del sector privado y casi 59.000 del sector público.
Las consultoras coinciden en que la novedad es la baja en la calidad de los puestos de trabajo que se generan, que son los que compensan las pérdidas de la industria: crece el empleo por cuenta propia y la precarización.
“Crecieron casi de un 80% las importaciones, pero muy direccionadas hacia algunos sectores”, afirmó el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Martín Rappallini en su visita reciente a Córdoba y planteó: «Estamos en una situación compleja por el costo argentino».
Por caso, fuentes industriales aseguran que «calculado en dólares, el salario de un trabajador en Brasil es la mitad de que cobra un operario en Argentina». Con este dato, el empresariado prefiere reclamar la reforma laboral antes que una modificación del tipo de cambio.
Crisis de empleo por precarización
En marzo pasado, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) publicó que uno de cada cuatro empresarios industriales advirtió que despediría personal en el primer cuatrimestre de 2025.
En este listado se anotaron Industrias J.F. SECCO, que trabaja para las distribuidoras eléctricas Edesur y Edenor y despidió a 30 operarios.
La empresa Acindar, de la multinacional ArcelorMittal, cerró el Tren Laminador N° 2 y esto genera la pérdida de más de 130 puestos de trabajo entre el personal de la cooperativa Cooperar 7 de Mayo.
En Rosario, la fábrica de heladeras y exhibidores refrigerados de El Dorado suspendió a 100 trabajadores por tiempo indefinido. El argumento es que cayeron el 40% las ventas en el primer trimestre del año. En Santa Fe, la empresa de heladeras Briket, despidió a cerca de 300 personas.
Lácteos Verónica, de la familia Espiñeira, con problemas de financiamiento y baja en la producción, tiene dificultades para pagar el salario de 700 trabajadores, que denuncian retención de aportes patronales y el no pago de la obra social. La empresa tiene paralizadas las plantas de las localidades de Suardi y Clason.
En este sector, es notoria también la crisis de SanCor, que arrastra una deuda histórica de u$s 400 millones y que en febrero despidió a 300 trabajadores.
Automotrices, frigoríficos y ceramistas
General Motors suspendió personal de su planta santafesina de Alvear y en enero ya forzó 167 retiros voluntarios y despidió a 33 trabajadores.
En el Parque Industrial Pilar, la empresa de electrodomésticos Whirlpool despidió a 60 personas, sobre un plan, por ahora postergado, de echar a 120 más. La empresa inauguró esta línea de producción en 2023.
El frigorífico Devesa de Azul, cuyo nombre comercial es Azul Natural Beef, echó a 40 trabajadores. En esta medida también influyó el corte de exportaciones a México por cuestiones sanitarias. También en la provincia de Buenos Aires, el Frigorífico Regional Las Heras, ubicada sobre la ruta 40 registra demoras e incumplimientos salariales desde comienzos de año.
La pesquera chubutense Mirabella inició un concurso preventivo, despidió cerca de 30 personas de su plantilla y registra deudas por casi $ 800 millones.
La fábrica de cerámicos Canteras Cerro Negro, del grupo Sociedad Comercial del Plata, despidió a 96 trabajadores y tuvo que reincorporar a 40.
La mayoría de las empresas del sector ceramista está con suspensiones debido a la retracción de la construcción, explicaron fuentes de la Federación de Obreros Ceramistas (FOCRA).
Rodolfo Viegener, dueño de la fábrica de grifería Ferrum-FV anunció la suspensión de 600 trabajadores de su planta de Pilar. Consensuó con el gremio un esquema de 26 días de suspensión que termina en julio. El empresario dijo que no puede competir en precios con el mercado chino.
Georgalos ya dejó en manos del Banco Santander la evaluación de opciones de venta o capitalización de la empresa por la baja del consumo de sus golosinas.
La ocupación de los 250 trabajadores de la gráfica Anselmo Morvillo, de Avellaneda, ya lleva más de 90 días. La toma se inició la mañana siguiente al 24 de febrero, cuando la patronal anunció que no produrá más.
La tasa de desocupación, estable
Consultado por Letra P, el economista Federico Machado, de la consultora Open, aseguró: «Los sectores en recesión más profunda tienen mayor peso específico en la generación de empleo. La tasa de desocupación, sin embargo, está en un nivel similar al primer semestre de 2023, luego de una caída muy fuerte en 2024».
«La razón podría ser que muchas empresas en crisis optaron por reducir jornadas laborales y se resisten a echar a sus trabajadores», evaluó.
Machado detalló que la producción de la industria está un 17% debajo de su nivel en 2023 (marzo contra marzo), la construcción -19% y el comercio -8%.
