El resultado de las elecciones en Santa Fe tiene un dato duro que trasciende esa provincia. El PRO perdió el 10% de los votos con relación a 2011. La construcción mediática del macrismo como potencia electoral cobra así su real inserción en la sociedad. Los santafesinos desnudaron al rey coronado por Magnetto.

El socialismo parecería haber mantenido la gobernación de Santa Fe de acuerdo con los resultados provisorios. Los 2.100 votos de diferencia con el segundo (0,12%) demandan sin embargo el recuento definitivo de la Justicia Electoral. Pero más allá del resultado final, el pronunciamiento popular de Santa Fe tiene lecturas que trascienden la gobernación en juego.  Es lo que nos interesa en Misiones.

El dato más contundente surge de la comparación de los votos obtenidos en 2011 por Miguel Torres del Sel, un invento de Mauricio Macri para desembarcar en la provincia. Entonces, el cómico obtuvo 612 mil votos, el 35,2%. Ayer, su caudal electoral cayó a 556 mil votos que representan el 30,5%. Y eso que ahora estuvo sobre la mesa el  apoyo que antes, desde las sombras, le dio Carlos Reutemann.  Es decir que el macrismo perdió votos en Santa Fe. Si a la decepción encarnada en la figura del hombre de la farándula se le suman los resultados de Salta, Río Negro y Chaco, se puede arriesgar la hipótesis de que el PRO no termina de estructurarse nacionalmente y sigue siendo un fenómeno porteño.  En las primarias del Chaco se intentó con la “gran alianza”. Terminaron perdiendo todas las fuerzas de las oposiciones. En Río Negro no pudieron hacer pie y en Salta respaldaron la fórmula promocionada por Massa.  Un verdadero dolor de cabeza para los estrategas de las derechas.  En Santa Fe, el rey coronado por Magnetto quedó al desnudo.