Matías Fernández, uno de los fundadores de Misiones Activa, reseñó las actividades de la Asociación que ejecuta proyectos relacionados con la salud, el ambiente y otras áreas sociales, en acciones que buscan generar un impacto positivo en la Provincia. La Asociación está conformada por más de 20 socios activos y unos 80 socios que acompañan. Impulsan la transformación de comunidades guaraníes «reforestando el futuro», a través de la recolección de semillas, según explicó Matías Fernández en Plural TV.
Viernes 14 de julio de 2023. La iniciativa de Misiones Activa comenzó hace cuatro años, cuando un grupo de amigos decidió unirse para abordar los problemas que observaban en su entorno. Desde entonces, trabajaron diversos proyectos, como la investigación sobre el uso del aceite de cannabis para ayudar a pacientes que enfrentan el síndrome de abstinencia. Este proyecto, que ya lleva dos años en desarrollo, contó con la colaboración de expertos de diferentes disciplinas, incluyendo ingenieros químicos, farmacéuticos, psiquiatras, psicólogos, nutricionistas y profesionales en marketing y comunicación.
Matías Fernández, uno de los fundadores de Misiones Activa, dijo que el proyecto generó un impacto positivo en Misiones. La asociación, conformada por más de 20 socios activos y más de 80 socios colaboradores, se dedica a la ejecución de proyectos relacionados con la salud, el ambiente y otras áreas sociales.
En el cuidado ambiental, Fernández explicó que Misiones Activa también está trabajando de manera conjunta con la comunidad guaraní de San Ignacio Tavá Mirí, a través de un convenio firmado con la Dirección de Asuntos Guaraníes, para la recolección de semillas de especies nativas, en un acción de colaboración de saberes.
En ese sentido, Fernández recordó que la recolección de semillas no es frecuente en las comunidades y Misiones Activa llegó con la propuesta. Con el apoyo de Asuntos Guaraníes y otros expertos en genética y bioquímica, el proyecto busca recuperar el monte nativo perdido en la comunidad, además de brindar la posibilidad de generar un ingreso económico a través de la recolección de semillas y la producción de plantines. Esta es una experiencia piloto con visión a largo plazo.
“El objetivo es colaborar con la comunidad y no imponerles conocimientos, por lo que el enfoque es trabajar en conjunto y aprender de ellos. La asociación donó tres mil plantines de especies nativas para reforestar, primero, la comunidad” aunque también planean recolectar semillas de especies ya existentes. Mientras tanto, encaran la construcción de un sombráculo y avanzan en la instalación de un sistema de riego automático. “El entusiasmo y la participación de la comunidad fue impresionante”, destaca.
Misiones Activa cuenta con el apoyo de diversas instituciones, como el Ministerio de Cambio Climático, el Instituto Nacional de Semillas (Inase) y el Estado provincial. La asociación busca crear un mercado de semillas misioneras y está interesada en involucrar a más comunidades guaraníes en esta iniciativa. Con el tiempo, esperan llegar a 15 comunidades más y expandir su trabajo a diferentes regiones fitogeográficas de la provincia, aprovechando la diversidad de especies presentes en cada zona.
El compromiso de Misiones Activa es abordar los desafíos sociales y ambientales de manera integral, brindando soluciones concretas y sostenibles, según plantea Matías Fernández como vocero del grupo. A través de la recolección de semillas y la producción de plantines, el proyecto busca recuperar el monte nativo y preservar la biodiversidad, además de generar ingresos económicos para las comunidades. Ansían, en este sentido, que el enfoque colaborativo y la visión a largo plazo de Misiones Activa se traduzca en un futuro prometedor para este proyecto y para las comunidades involucradas.
Matías Fernández en Plural TV
-¿Matías, qué es Misiones Activa?
-Misiones Activa comenzó con un grupo de amigos, hace cuatro años y somos más de 20 socios activos trabajando en los proyectos y más de 80 socios que acompañan. Empezamos porque veíamos problemas que queríamos resolver. Desde la asociación tenemos proyectos relacionados a la salud, el ambiente y a cuestiones sociales. Tenemos un equipo transdisciplinario, donde hay ingeniero químico, farmacéutico, psiquiatra, psicólogo, nutricionista, licenciados en marketing y comunicación. Tenemos proyectos como el de aceite de cannabis para ayudar a pacientes que están atravesando el síndrome de abstinencia, para que sea más manejable. Es un proyecto de investigación que ya tiene dos años.
-¿Es un proyecto de investigación con producción?
-Exactamente, como todo proyecto de investigación primero se tiene que aprobar; pasamos por convenios; hace un año tenemos convenios con la Universidad Nacional de Misiones (UNaM), que sumó equipos; también licenciados en Genética en su mayoría con posgrados, y varias disciplinas diferentes, como bioquímicos, farmacéuticos -la mayoría son directores de cátedra- que se suman para darnos una mano en la parte técnica, eso en lo relacionado a la salud. Respecto al ambiente, tuvimos una actividad este fin de semana en la comunidad guaraní de San Ignacio Tavá Mirí. La actividad que hicimos nace de un convenio que firmamos hace casi un mes con la Dirección de Asuntos Guaraníes, gracias a Lucas Leone, el director de Producción. Nos acercamos con el objetivo de ingresar a la comunidad y trabajar en conjunto con los integrantes de esa comunidad, aprendiendo juntos la manera de recolectar semillas -digo esto porque nosotros no vamos a enseñarles nada, sino a colaborar con ellos en esta tarea-.
-¿Una tarea que no se realiza mucho, no?
-La realidad es que en ninguna comunidad se realiza la tarea de recolección de semillas. Es una idea que surgió desde la Asociación, que compartimos con el director de Producción de Asuntos Guaraníes, con Lucas, y él identificó una comunidad que podría llegar a adaptarse a esto.
-¿Para qué juntan semillas de especies nativas?
-¿Alguna vez te preguntaste la cantidad de semillas que da un árbol en un año?
-No (risas).
-Si salís a la avenida y ves las cañafístolas, por ejemplo, podés ver que están llenas de semillas en esta época del año. Un árbol de esos te da 15 mil semillas aproximadamente en un año. Por eso uno piensa cómo puede ser que nos estemos quedando sin árboles en el mundo. Es por eso que en la Asociación, en conjunto con Asuntos Guaraníes y la comunidad, queremos recoger la mayor cantidad de semillas que podamos de esta comunidad como prueba piloto. Si esto sale bien y el trabajo en conjunto funciona, podamos hacerlo en 15 o 20 comunidades más que se quieran sumar. Hay dos cuestiones, por un lado, el objetivo del recupero del monte nativo perdido en la comunidad; por otro lado, la posibilidad de tener un ingreso económico por esa tarea; que no va a consistir en talar un árbol para hacer una artesanía sino en cuidar ese árbol para recolectar sus semillas y hacer miles y miles de plantines. Venimos a hacer ese trabajo con esta comunidad, a aprender con ellos. Por supuesto que cuando uno ingresa a la comunidad se encuentra con un montón de problemáticas donde no podemos mirar para otro lado: por eso, la actividad de esta semana fue integral; si bien fue Misiones Activa con sus voluntarios, también fue la gente de Asuntos Guaraníes, un equipo del Ifai a través de la ingeniera Silvana Sandoval, que enseñó en una breve charla cómo llevar adelante cultivos de una huerta con productos de estación; así ellos (el Ifai) aportaron semillas y planificamos cómo armar una huerta para que puedan tener productos de estación en su comunidad.
-Hay algo que no entiendo. ¿Se les paga por recoger semillas y producir, y esos plantines se usarán para repoblar árboles de esas comunidades y además para vender?
-Nuestro sueño sería que ellos puedan tener un ingreso por esa actividad, en una primera instancia el ingreso va a ser económico y con aportes de plantines para reforestar la comunidad. Como recién empiezan y todavía no se pueden recolectar semillas porque estamos trabajando con ellos resolviendo primero lo más urgente, desde la Asociación se donaron tres mil plantines de especies nativas: lapacho, guayubira, palo Rosa, anchico, timbó, y empezamos a plantarlos este fin de semana. Es increíble cómo se sumó esta comunidad cuando pensamos que nosotros íbamos a tener que realizar la tarea, pero la comunidad entera se puso a disposición. Le avisé al cacique de la comunidad, a Germán, que dentro de un mes íbamos a ir para seguir plantando, y me dijo que el domingo estuvieron plantando todo el día. Eso es lo que queríamos. Todo arranca de un sueño de ellos, acá el centro de atención son ellos, ellos son los que quieren recuperar su comunidad; el cacique identificó: “qué iban a hacer los chicos que viven en la comunidad más adelante sino iban a tener árboles ni para hacer artesanías”. Entonces, Asuntos Guaraníes ayudó a construir un sombráculo, y tenemos proyectado esta semana terminar con un riego automático porque sabemos que si no hay agua los plantines mueren. Así es que vamos a compartir nuestros conocimientos con ellos y dejar funcionando ese sombráculo con riego automático para que ahí podamos poner los plantines que llevamos. Ahora llevamos 500 para la primera actividad, pero la idea es llevar los tres mil y que no se mueran hasta que se terminen de plantar. Lo importante es todo lo que surge de esta actividad. Fue gente del Ministerio de Cambio Climático también, por suerte tenemos amigos en diferentes instituciones que acompañan, cada uno está en un lugar del Estado, y lo bueno es que el Estado está abierto a esto; ve que la asociación tiene interés y nos acompaña con conocimientos, recursos; porque la Asociación tiene ideas, energía, pero no tiene muchos recursos. Así que salió algo increíble en la visita a esta comunidad; nos emocionamos mucho, al finalizar pudimos almorzar todos juntos. Mi miedo era que sea difícil trabajar en conjunto, pero estuvo muy lejos de eso, al punto de sorprendernos que hay un gran futuro con esto.
-Decías que es una actividad social y ambiental…
-Así es. Imaginate que en las pocas veces que fuimos a la comunidad recorrimos el monte nativo que tienen, que era de 20 hectáreas, de las cuales dos aún son monte nativo y el resto ya está desmontado. En esas dos hectáreas pudimos identificar varios árboles semilleros. Nosotros estamos en contacto con la gente del Instituto Nacional de Semillas (Inase); como asociación civil estamos inscriptos en ese Instituto (tenemos la categoría A y H) que nos permite hacer esta tarea, recolectar semillas; se georreferencia cada árbol semillero y eso automáticamente se sube a un sistema nacional. El mercado de semillas nacional no existe… en realidad, cuando hay demanda no hay oferta, y cuando hay oferta no hay demanda. A nosotros nos pasó con nuestro vivero, de salir a buscar semillas que queremos producir y compramos semillas hasta agotar el stock que había en Misiones. Así es que identificada la necesidad, estamos muy interesados en crear el mercado de semillas misioneras con la ayuda de todas las comunidades guaraníes que se quieran sumar a esto.
-Me decías que tienen previsto llegar a 15 comunidades más…
-Sí, es un sueño, pero “el que mucho abarca poco aprieta”, y a cada compromiso lo tomamos con responsabilidad. Como te dije, cuando llegamos a la comunidad nos encontramos con un montón de otros problemas, que no podemos mirar para otro lado. Así es que la idea es afianzar la tarea, y una vez que tengamos el esquema de trabajo con ellos ir sumando, porque el mismo cacique me dijo que tiene amigos de otras comunidades que también se pueden sumar.
-Teniendo en cuenta que Misiones está dividida en zonas (centro, norte y sur) ¿Tienen planeado trabajar en una zona en particular o en toda la provincia?
-El objetivo sería tener regiones fitogeográficas diferentes porque tenemos especies distintas, en el norte tenemos el Pino Paraná, y en el sur tenemos otras especies. Entonces la idea sería tener semillas de toda Misiones y poder ofrecerlas a empresas que estén trabajando con el recupero de zonas degradadas y también al mismo Estado provincial y, por qué no, a otras provincias del país que estén interesadas. Nosotros vamos a recolectar cientos de miles de semillas; imaginate que un árbol da esa cantidad, así que si hacemos ese trabajo a conciencia probablemente tengamos mucho stock para ofrecer.

