Misiones Plural

“El Inym dio respuesta a la problemática en su momento y fue una herramienta de solución”, dijo el diputado Aníbal Vogel. Pero admitió que se requieren modificaciones urgentes. Reiteró que estudian una propuesta conformada con el aporte de todos los sectores. El año que viene el sector debe tener otro panorama, anhela.

Posadas (Martes 21 de junio). Los productores yerbateros realizan un paro total de actividades en reclamo del cumplimiento de los precios establecidos por la Nación y del pago al contado. Como no lograron avanzar en alguna solución, desde este lunes recrudecen las protestas y los reclamos.
Misiones Plural consultó también con el diputado Aníbal Vogel sobre qué hay que hacer con el Inym: “no abandonarlo, pero hacer los cambios que sean necesarios”, dijo, y estimó que la propuesta de reforma del Instituto saldrá con el aporte de todos los sectores.
“Debemos adecuar el Instituto a la realidad que está demostrada en las operatorias que se dan en la cadena. Esas modificaciones requieren que hay que terminar, si, con la unanimidad: eso es un gran paso para avanzar como también lo es el precio a la salida de molino, que no se habla”, dijo.

-Diputado Vogel, ¿qué hay que hacer con el Inym?
-Creo que hay que ir para atrás y ver cómo se inició el Inym. Esto comenzó con la idea de conformar un Instituto después que desapareció, o destruyeron, la Crym (Comisión Reguladora de la Yerba Mate) y tantos organismos o modos que tenía el Estado de intervenir en el mercado, como lo hacía por ejemplo en el precio del raleo, la empresa Papel Misionero, que era una empresa testigo para ese precio. El Inym salió a dar respuesta a la problemática yerbatera y en su momento fue una herramienta de solución, eso hay que decirlo. Pero ahora los tiempos demuestran que es hora de hacer modificaciones, urgentes.

-Algunas propuestas hablan de que el Inym no sirve y por lo tanto, Misiones debería retirarse del Instituto.
-Yo no me animo a decir que nos aislemos de la Nación y que salgamos del Instituto, aunque también entiendo ese acto político de aparecer ahora en los medios, defendiendo al sector sin buscar la solución definitiva ni los caminos de la solución a largo plazo, donde deberemos estar todos juntos. Acá estamos en una coyuntura muy compleja donde el Estado está tratando de intervenir con líneas de créditos. Y hay una a mediano plazo que los legisladores estamos discutiendo: estamos consensuando -porque coincido con el colega Escalada (el diputado Hugo Escalada) que tenemos que tomar el toro por las astas- y analizamos las propuestas que tenemos. Debemos adecuar el Instituto a la realidad que está demostrada en las operatorias que se dan en la cadena. Esas modificaciones requieren que hay que terminar, si, con la unanimidad: eso es un gran paso para avanzar como también lo es el precio a la salida de molino, que no se habla. Yo insisto con la modificación en el método de la verificación de palos (porque no se debe moler palitos para que pasen desapercibido como polvo de hoja). Hay muchas aristas que tenemos que tener en cuenta en este tema, y no se puede proponer modificaciones de manera improvisada.

-¿Aunar las propuestas?
– Si, tenemos que juntar todas las propuestas, movilizar a los legisladores nacionales de las dos Cámaras. Pero esto es un trabajo en serio, sin necesidad de mediatizar ni correr con los tiempos. Aunque termine la zafra y así nos sorprenda agosto u octubre, tenemos que lograr que antes de fin de año este tema sea tratado en las Legislaturas nacionales para que el próximo año tengamos otro panorama. El año pasado nadie hablaba de esto porque el contexto era bueno. El año antepasado tampoco se hablaba, cuando estábamos en el apogeo de la yerba. Pero este año es un año con problemas, de costos financieros y de dinero que se habla poco. Muchas empresas especulan porque les conviene más dejar su plata a plazo fijo y no inyectarla en el mercado comprando yerba porque, total, se manejan con la canchada de secado rápido. Hay muchos elementos que complicaron y nos llevaron a la situación actual, como el clima, que también favoreció a la sobreproducción de la planta: llovió mucho, hubo buen sol, el frío tardó en llegar entonces hay mucho volumen de producción. Es una coyuntura especial pero más allá de todo eso, esta herramienta debe ser discutida. No hay intenciones de dilatar nada porque sería incongruente en nuestra intención de atender y responder al pequeño productor.

“Redondearemos todas las propuestas”
Aníbal Vogel preside la comisión de Desarrollo Forestal, Agropecuario y de Cooperativas de la Legislatura misionera, donde se discute los pasos a seguir frente a la problemática yerbatera, a pesar que las políticas del sector depende del Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym) y del laudo de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, que fijó los precios que no se cumplen. La Legislatura provincial debate, en cambio, la posición política y técnica que llevarán adelante para pedir la modificación de los artículos de creación del Inym que hoy afectan a los productores.
Vogel insiste con que ese reclamo estará conformado por los planteos de todos los sectores, “para corregir lo que haya que corregir, con el consenso de todos”, aseguró a Misiones Plural. “Si este Gobierno de la Renovación no hubiera intervenido al comienzo de los años 2000 con las Cooperativas, las pequeñas y medianas, la situación actual sería de la yerba sería catastrófica porque, -dijo- esas Cooperativas hoy absorben un porcentaje de producción de la yerba y siguen funcionando. Pero todavía hay mucho camino para avanzar y corregir”, aseguró.
El diputado consideró también que las propuestas del diputado Héctor “Cacho” Bárbaro, que en todas las reuniones de la Comisión reclama celeridad para tratar el tema, “es muy interesante en general, desde la tasa que propone, aunque en lo personal tengo mis dudas respecto al subsidio, porque temo que eso signifique transferirle recursos nuevamente al que más tiene. Puede ocurrir que el comprador argumente en pagar menos porque el productor recibe ese subsidio. Hay que ser cuidadoso de la manera en que se implementa: quizás una parte en subsidios y otra en créditos porque el productor quiere cobrar bien pero también quiere comprar un buen tractor, quiere tener una línea blanda de crédito; no hay que olvidarse que hoy es más fácil comprar un auto que un tractor”, ejemplificó.
Pero “estamos analizando una serie de ideas que volcaremos y redondearemos en esto que será la lucha de todos los legisladores, también”, dijo finalmente el diputado.