Prevención de incendios, andamiaje legislativo en favor del ambiente y el desarrollo ordenado de la actividad productiva inciden en la posición ambiental y de biodiversidad que exhibe Misiones, destaca el subsecretario Martín Recaman en Plural TV.
Jueves 15 de diciembre de 2022. Si bien las condiciones climáticas de este año son mejores a la del año pasado, con el verano vuelven los riesgos de incendios. La topografía de Misiones, con serranías, vuelven complejo el abordaje en determinados sitos “y prolonga en el tiempo el combate de un incendio” al comparar con los que se producen, eventualmente, en la zona sur, donde predominan los campos y pastizales, dijo el subsecretario de Ordenamiento Territorial del Ministerio de Ecología y Recursos Naturales Renovables de Misiones, Martín Recaman.
“La planificación nos sirvió muchísimo para el desarrollo de la agenda en función del fuego que profundizamos sobre tres ejes: la búsqueda de la participación de la sociedad en minimizar el riesgo; el control, con el monitoreo, el desarrollo de datos, poder llegar de forma temprana a los incendios, que es donde usamos mucha tecnología; y por último, el combate”, donde el Ministerio no es el único actor sin que intervienen el Plan Provincial de Manejo del Fuego, los guardaparques, bomberos de la policía y bomberos voluntarios, los municipios y el sector privado, dijo.
En la entrevista con Plural TV, Recamán destacó también los aspectos legislativos que posicionan a Misiones como una provincia vanguardista en el cuidado y la preservación ambiental, y rescató el ordenamiento territorial que permite el desarrollo económico sin afectar la biodiversidad y las áreas protegidas.
La nota de Martín Recaman en Plural TV
-¿Qué están haciendo en la Subsecretaría, Martín?
-La Subsecretaría tiene como eje principal la planificación y el ordenamiento del territorio. Lo que busca es un equilibrio, ya que cuando se ordena y planifica el territorio, los ejes son lo social, lo económico productivo y lo ambiental, por eso estamos dentro del Ministerio de Ecología. Ordenamos el territorio teniendo presente el cuidado del ambiente. Pensemos que cuando ordenás territorio lo hacés en superficie. Estamos hablando de 1,6 millones de hectáreas de bosque nativo, en un territorio de tres millones de hectáreas, en el cual debes tener muy presente el ambiente a la hora del ordenamiento.
-¿Por qué hablamos siempre de este tema, por qué el ordenamiento es un tema que trabaja el Estado?
-El ordenamiento es fundamental; implica consenso permanente, es decir, el hecho de conservar, de tener una política de conservación del bosque nativo implica un consenso; hay un acompañamiento de la sociedad en esto. Entonces creo que todo lo que uno desarrolla en el territorio implica tener en cuenta que el suelo, porque la superficie es finita. Esto implica muchas veces encontrar un acuerdo, definir, planificar hacia dónde crecen nuestros municipios, los límites, las cuencas, todo esto que permanentemente vemos y que se da en la legislación. Este año tuvimos una Ley de Humedales, cuando en el país todavía no hay una Ley de Humedales. ¿Por qué no hay una? Porque implica un consenso sobre estos ejes que hablábamos. Creo que Misiones tiene una Ley de Humedales porque tiene un consenso, porque tiene claro la conservación de los humedales.
-Una Ley de Humedales que llegó hasta Colombia, llevada por “Chun” Barreto, el autor del proyecto, y lo expuso allá con mucha repercusión. Siempre sale desde la esfera oficial la vanguardia misionera en temas ambientales, pero ¿acompaña la población, lo entiende la gente?
-Estoy convencido que sí porque la política va de la mano de lo que la sociedad va demandando… Misiones tiene a lo largo de los años muchísimos antecedentes y muchos avances sobre las cuestiones ambientales. Hemos tenido el primer Ministerio de Ecología del país (creado en 1984),la conformación del Instituto Misionero de Biodiversidad, que es sin lugar a dudas la profundización de un área dentro del Ministerio de Ecología, es decir, el Ministerio tenía un área de biodiversidad y esto lo profundiza, y lo lleva a otra escala de análisis; y hace muy poco tenemos un Ministerio de Cambio Climático. En lo que tiene que ver con la generación de instituciones hay hechos concretos en que se han consolidado; pero también hay un gran cúmulo de leyes. En estos tiempos la Ley de Humedales, relacionado a las cuencas, que establece la conformación de un comité de cuencas y establece instituciones y organizaciones vinculadas a cuestiones ambientales. Esto es producto de una demanda social. Creo que estas leyes han venido a respaldar esa demanda social.
-Se viene el verano, el calor. ¿Se vienen los incendios?
-No estamos ante un escenario de sequía como el verano pasado. Nosotros monitoreamos los datos en lo relacionado a la alerta temprana, a cómo se está comportando el clima. Hemos tenido mayor cantidad de precipitaciones, mejoró la cuestión hídrica, pero el fenómeno de La Niña sigue presente y cambian las condiciones climáticas. Esto significa que genera mayor sequía, mayor temperatura, cambian los vientos, las precipitaciones, la humedad en el suelo, y esto afecta el uso del fuego; que es parte de la actividad productiva, de la cultura en todos los sectores de la sociedad. Por eso es tan importante abordar la temática, la concientización en todos los sectores de la sociedad.
-No quedarnos solamente con el slogan: “no quemes, no prendas fuego”, sino entender que es parte de las prácticas…
-Es importante entender que es parte de la actividad productiva, de las comunidades. Todos lo usamos, en las partes suburbanas también, porque muchas veces existe esta cuestión de que “lo usa este sector, tal otro”, pero en realidad lo usamos todos. Si entendemos que es una cuestión cultural y que hoy cambió el clima, y que ante el uso del fuego debemos tener mucho cuidado, y tener presentes otras herramientas, creo que vamos a minimizar el riesgo. Minimizar el riesgo depende de todos, es decir, que no tengamos riesgo de incendios depende de la responsabilidad de todos, sobre todo en el verano.
-Sé que están trabajando esa responsabilidad con algunos sectores, ¿con cuáles y cómo?
-Con todos los sectores; tenemos reuniones con los productores hablando de la problemática, explicando las herramientas, los cuidados, cómo hacer una calle cortafuego, cómo utilizar el fuego, qué días debemos utilizarlo, explicando el índice de peligrosidad de incendios. Cuando hablo de herramientas, el índice me parece fundamental, que es lo que todos los días estamos difundiendo en los medios de comunicación. Es un cálculo que te dice cuándo el fuego es peligroso y cuándo no. Esa es la principal herramienta que se debe tener presente a la hora de usar el fuego. Además hay que entender que hay reglamentaciones que no tienen que ver con un capricho sino con una necesidad de la época, y que debemos avisar a los bomberos, a nuestros vecinos; debemos hablar de esta problemática. Hablamos con los productores, con las comunidades, ya que también tienen su reglamentación con el fuego, en la búsqueda de la miel, en el verano. Así es que trabajamos esta problemática con ellos, llevamos herramientas como ahumadoras que permiten el uso del fuego pero de una manera más segura. Entonces, la idea es buscar un uso responsable del fuego; también trabajar con los chicos en las escuelas rurales, productivas, donde tienen su relación con la parte de la producción, y pueden transmitirles el mensaje a sus padres. Hemos encarado esta tarea también con los organismos, hemos hecho capacitaciones en los municipios para que el técnico que está vinculado a la producción sea también un mensajero de la problemática. Ha sido un trabajo preventivo que hemos llevado durante todo el año.
-¿Trabajan todo el año o se arma un embudo a fin de año?
-Nuestra Subsecretaría está vinculada a la planificación, a la construcción de datos. La planificación nos ha servido muchísimo para el desarrollo de la agenda en función del fuego, que tuvimos que profundizar muchísimo, sobre tres ejes: uno que es la búsqueda de la participación de la sociedad en minimizar el riesgo; otro, con el control, con el monitoreo, el desarrollo de datos, poder llegar de forma temprana a los incendios, que es donde usamos mucha tecnología. Por último, el eje que tiene que ver con el combate, donde no somos el único actor, sino que tenemos por parte del Ministerio de Ecología el Plan Provincial de Manejo del Fuego, los guardaparques, también bomberos de la policía, bomberos voluntarios, que son actores muy importantes. Así es que se ha trabajado sobre esos tres ejes: combate, prevención y control.
-¿Estamos preparados para enfrentar una situación extrema?
-Hemos profundizado muchísimo. Creo que esto es un ejercicio permanente en lo que refiere a prevención; es un ejercicio año a año porque esto es producto del cambio climático, y estos factores han venido para quedarse. Han cambiado las condiciones del clima, lo que implica una mayor responsabilidad en el tema. Me parece que la prevención es un trabajo como un fortalecimiento de músculo, es trabajarlo todos los días, durante todo el año, e ir profundizando en la temática. Creo que en materia de combate trabajamos muchísimo en fortalecimiento, equipamiento. Hemos visto en las noticias: desde helicópteros, equipamiento de los bomberos voluntarios, bomberos de la policía, el Plan Provincial de Manejo del Fuego. Los bomberos han tenido su equipamiento, pero también su formación, porque hay que formarse para lo que no es un incendio estructural, sino un incendio forestal. También se ha profundizado mucho en eso. Creo que todo lo que estamos trabajando: la prevención, el control, son fundamentales, ya que es poder abordar un incendio en forma temprana. No es lo mismo llegar a un incendio cuando ya implica la intervención de varias fuerzas, sino implica la intervención de una sola fuerza. Cuando tenemos el índice alto hay un sistema que nos alerta cuando hay un posible foco de incendio, informamos que en uno de los sectores de la provincia podría haber un incendio y en un caso que tuvimos llegó la policía y efectivamente comprobamos que llegamos a un foco de manera temprana. Estas herramientas de control que hemos implementado desde la Provincia vienen a permitir una alerta y un abordaje tempranos. Creo que estamos muchísimo mejor preparados, y esperemos que den buenos resultados.
-¿Quiénes integran la red que lucha contra el fuego? ¿Quiénes son los que trabajan en estas prevenciones?
-Todos. Por eso hemos apuntado a la sociedad cuando hemos trabajado capacitaciones de prevención, también hemos involucrado a los organismos porque en ese momento trabajamos con los ministerios del Agro y la Producción; de Cambio Climático; de Agricultura Familiar. ¿Por qué Agricultura Familiar o el Agro? Porque teníamos que sentarnos a trabajar con técnicos de los organismos, a explicarles otras técnicas que tal vez no utilizan con el fuego, para ir cambiando conductas. Entonces es importante la participación de todos los organismos en esto. Pero cuando empezamos a trabajar en control no son los mismos actores que trabajamos en prevención. Cambiamos y trabajamos con otros organismos: los intendentes son muy importantes en la parte del control, son un actor que nos vincula; Asuntos Municipales es un actor muy importante con el que permanentemente estamos vinculados; los bomberos de la policía. En el combate somos un montón de fuerzas, e incluyo además de los que te comenté, Vialidad, hemos tenido reuniones con el Iprodha, con Salud Pública que el año pasado participó. Cuando estás en combate necesitás un montón de actores, una planificación. Yo siempre digo que no es solamente ir y combatir un incendio. Detrás de ese combate hay una planificación para un medio aéreo desde un punto GPS; es algo muy sencillo, pero hay que dar las coordenadas de esa localización, hay que planificar dónde va a tomar el agua el helicóptero, eso implica un equipo técnico informático detrás que está aportando toda esa información. También necesitás un equipo de salud para los brigadistas que están combatiendo, necesitás una logística con los intendentes. Cuando hubo combates con los incendios por ahí no se vio, pero el trabajo de los intendentes en el hospedaje de los bomberos que están en la zona, el recurso del agua, toda la logística de alimentación de brigadistas -que tienen una alimentación muy especial porque esa persona está combatiendo, en el calor, en una situación muchas veces de deshidratación- es muy importante. Hay un trabajo en conjunto muy importante, una planificación, por eso hemos trabajado de forma muy coordinada, involucrando a todos los actores.
-¿Cuál es la zona más peligrosa, más comprometida?
-Los datos que desarrollamos el año pasado dicen que es la zona central. El territorio de Misiones tiene una particularidad, que tiene una topografía muy accidentada, que tiene situaciones de serranía, y eso muchas veces hace muy complicado el abordaje de un incendio, y prolonga en el tiempo el combate al mismo. Circunscribir un incendio en una situación de topografía como tiene Misiones, es mucho más difícil que en una zona como Posadas, que es una zona de pastizales, y se hace mucho más fácil el combate, el abordaje, y podés llegar con vehículos.
