Ramón Ayala cumple hoy 96 años de vida “extraordinaria, natural”. Trabajaba en un frigorífico cuando, a sus 15 años, se compró la primera guitarra que aprendió a tocar de manera autodidacta. Veinte años más tarde el Che Guevara le contaría que cantaba sus canciones en los fogones revolucionarios en la Sierra Maestra. Con su música viajó por el mundo, inventó un nuevo género musical; además, es pintor y escritor. Un recorrido extraordinario para el Mensú, que hoy cumple 96 años de vida. Por su cumpleaños, Ramón Ayala será homenajeado en Posadas y Garupá.

Por Matías Machado

Viernes 10 de marzo de 2023. Toda descripción cliché para los artistas se queda corta cuando de Ramón Ayala se trata: “el multipremiado, el famoso, el internacional…”. El Mensú es uno de los grandes valores de la cultura argentina y es el prócer de la música litoraleña. Creó más de 300 canciones. Además, expuso sus pinturas en distintos rincones del país y Sudamérica. También publicó varios libros sobre relatos, poemas, reportajes y dibujos.
Ramón Gumersindo Cidade nació el 10 de marzo de 1927 en Garupá. Su papá falleció cuando tenía cinco años, por lo que su mamá mudó la familia a Buenos Aires. Es el mayor de cinco hermanos, por lo que tuvo que trabajar duro desde muy joven para colaborar con la olla familiar. Todavía era un niño cuando repartía programas de cine y hacía changas callejeras. A la edad de 15 años alteró el último número de su edad en su libreta de enrolamiento por un ocho, para poder entrar a trabajar a un frigorífico. Así juntaría unos pesitos para comprarse su primera guitarra. Ese sonido que no era extraño para él, ya que su madre tocaba la guitarra y cantaba, además de componer. También, cuando juntaba unas monedas se dirigía a un bar a escuchar al mendocino Félix Dardo Palorma, observando atentamente sus punteos, para luego tratar de imitarlos en su casa.
Casi sin notarlo pasaría a integrar el dúo de Félix Palorma y Margarita Palacios. Más adelante tocaría con el correntino Rulito González y el rosarino Damasio Esquivel. Con este último debutó en radio Rivadavia y el Palermo Palace.
En 1957, Horacio Guaraní difundió en Radio Belgrano la canción El Mensú, de Ramón Ayala, consiguiendo que se difundiera por las radios. A partir de ahí comenzó a trabajar con Emilio Biggi, Juan Escobar, Samuel Aguayo, Mauricio Valenzuela y otros. Más tarde cantó y tocó la guitarra con Arturo Sánchez y Amadeo Monjes, en el trío Sánchez-Monjes-Ayala.
Hacia 1960 Ayala decide abandonar el Trío y comienza su carrera como solista. Obras como «Zambita de la oración» (1953), «El Moncho» (1954), «El mensú» (1957), «El jangadero» (1959), «Sol de libertad» (1960) y el Cachapecero» (1960) incluían su repertorio y afianzaban su proyecto como cantor.
Por esos años creó el ritmo llamado gualambao, que cuenta que surgió “por una necesidad de sintetizar los ritmos regionales en una sola especie. Creé el gualambao, un ritmo guaraní generado en la región oriental de Misiones, frontera con Brasil y Paraguay, al que di la misión de vestir la selva, el Iguazú y los duendes de la tierra con un traje excepcional, de amplio espectro”, según replican varias fuentes.

Ramón y el Che Guevara
En 1962, el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP) invitó a Ramón Ayala a Cuba y asistió por curiosidad, según declaró alguna vez al periódico El Extremo Sur de la Patagonia: «estuve en una delegación con Rodolfo Walsh, José María Rosa, Salvador Allende que todavía no era presidente, Rigoberta Menchú, e hice amistad con Nicolás Guillén. Un día me avisan que Ernesto Guevara quería saludarme especialmente”, expresó a ese medio. Admitió en esa nota que “era tan solo un muchacho que no estaba consustanciado con la presencia del Che como prócer” pero que de todas maneras el encuentro lo emocionó, sobre todo cuando Ernesto Guevara le contó que cantaba sus canciones:

-Ramón Ayala, yo he cantado tu canción en los fogones de la Sierra Maestra.
-¿Sí comandante? Qué alegría. Es demasiado honor para mí. ¿Y cuál canción?
-Teníamos dos, ‘El Cosechero’, y ‘El Mensú’. Pero como ‘El Mensú’ tiene más elementos revolucionarios, es más frontal, optamos por esa. Y yo la cantaba en los fogones.

De aquel encuentro, Ramón guarda emoción. “Me dijo que era una obra revolucionaria. Me quedé encantado con el Che porque tenía una fisonomía interior parecida a la mía: creo que ambos somos revolucionarios. Nunca fui un guerrillero ni un apasionado de la guerrilla, pero siempre tuve la idea de que el hombre debía vivir bien, tener un trabajo digno, un estado de conciencia. Amo la guitarra y amo al pueblo y no concibo que Dios pueda ser tan cruel de crear una criatura para la prisión y el sufrimiento. Recuerdo algo más, el Che me dijo que él amaba esa canción, que en un verso dice: ‘Paz para mi tierra cada día más roja con la sangre del pobre mensú'», rememoró Ayala.
Ayala recuperó el término mensú que designa al peón de campo, al que monta a caballo y es guitarrero y poeta, o simple trabajador, un hombre también con un tinte erótico y claramente revolucionario para la época. Tanto se lo asoció con el personaje que canta a sus amores en la provincia que fue su cuna, que quedó como su pseudónimo: Ramón Ayala, el Mensú.

Una vida extraordinaria
Más tarde, durante diez años, viajó por España, Suecia, Francia, Italia, Rumania, Chipre, Uganda, Kenia, Tanzania, Líbano, Turquía, Kuwait Irak, las islas de los pescadores de perlas en el golfo Pérsico, Irán, Persépolis, Kurdistán (donde visitó la iglesia de los adoradores del diablo), Baréin y otros países del Oriente Medio donde realizó recitales y muestras de pinturas.
Cuando en una entrevista para el blog de la editorial Eterna Cadencia le dijeron que tiene una vida extraordinaria, El Mensú contestó: “Bueno, extraordinaria… Yo creo que es una vida natural. Creo que así debe ser el hombre: amar la naturaleza, quererla, tratar de sacar de ella lo más expresivo, lo más profundo. Y devolverla en obras. Porque la naturaleza no habla, ella hace. Nosotros somos los que tenemos que transformar las mudas palabras de ella. ¡Qué maravilla!”

Pinturas, dibujos y su obra literaria
Además de sus canciones, Ramón Ayala es conocido por ser un prolífico artista plástico. Recorrió galerías de Posadas, Mar del Plata, Buenos Aires, Salta, Corrientes, Mendoza y Córdoba en Argentina. También en Bolivia, Brasil y Paraguay.
Otra característica del polifacético artista es su pluma. Lleva publicados varios libros, entre los que se destacan “Poemas y Canciones” (1985); “Desde la Selva y el Río” (1986); “Cuentos de Tierra Roja” (1996) y“Las Trincheras Ardientes del Paraguay”(2020).
Sus obras se exhiben en museos e instituciones de todo el mundo. Recibió las más altas distinciones, entre ellas el Premio UNESCO para el Desarrollo de la Cultura y el Premio Fundación Konex. Es ciudadano ilustre de varias ciudades argentinas.

Homenajes en el día de su cumpleaños 96
En Garupá tendrá lugar un homenaje por el día de su cumpleaños hoy, viernes 10 de marzo de 2023, en la Costanera local a partir de las 18 horas, donde actuarán varios artistas. En la agenda de actuación se encuentran Fernando Farias y los Hermanos Buffa; Los Taquilleros del Chamamé; además de Armando Viera y su conjunto.
En Posadas se desarrollará un homenaje también este viernes, a partir de las 11 horas en la Escuela Secundaria de Innovación de Misiones, con una charla de Cacho Bernal.