Misiones libra su lucha y posicionamiento político, histórico y cultural, homenajeando a su actividad productiva, a sus pueblos y sobre todo, a su cultura que generó, gracias a una fusión con pocos precedentes, una tradición propia que también ayuda a enriquecer la identidad nacional argentina.
Lunes 15 de mayo de 2023. La idiosincrasia y las costumbres argentinas son tan diversas como su geografía, su historia y sus distintas influencias culturales. En el caso particular de Misiones a partir de la región que integran, más influenciada por Brasil y Paraguay, muestra rasgos culturales muy propios, una gran diversidad étnica y cultural, con una fuerte presencia de comunidades indígenas, inmigrantes europeos y, en menor medida, descendientes de inmigrantes africanos. Esta mezcla de culturas y tradiciones se ve reflejada en la gastronomía, la música, la arquitectura y otras manifestaciones culturales.
También es innegable que los habitantes de Misiones comparten aspectos culturales y sociales con sus vecinos de Brasil y Paraguay, como la música, muy popular en la región, que se manifiestan en una gran diversidad de artistas locales que interpretan estos géneros con gran pasión y maestría. Y que reconocen al maestro Ramón Ayala como uno de los artistas consagrados más importantes pero en él, a una diversidad de músicos de distintos géneros y de distintos tiempos, presentes en la cultura local.
Un punto aparte merece la gastronomía, donde se observan influencias de Paraguay y de Brasil, con la cocina europea y la cocina criolla, como la famosa chipa o la sopa paraguaya, los dulces o postres que conservan sus nombres europeos, o el feijão brasileño, junto con el consumo de la yerba mate, una bebida típica, precolombina, que se comparte en grupo y que se exportó al mundo.
Pero más allá de estas influencias externas, los habitantes de Misiones tienen una identidad propia, basada en sus tradiciones y costumbres. Precisamente a través del costumbrismo, muestra su manifestaciones culturales más importantes, rescatando un movimiento artístico y literario que busca reflejar la vida cotidiana, el día a día de la población, las vivencias de su gente apoyada a veces en la obra o la inspiración de Andrés Guacurarí y Artigas, Andresito, el héroe guaraní, que motiva en la música, la plástica, la danza, la escritura y hasta la política, al rescatar la vida en las chacras, los aborígenes, los trabajadores y todo el resto de su población.
Misiones está viva y con historia propia mucho antes de la conformación de la Argentina como una confederación de provincias. La integración al país fue un proceso histórico complejo que incluyó disputas territoriales ya entre las colonias españolas y portuguesas y después, incluso, con los países de la región, con un país central que no siempre fijó su mirada en la consolidación de la soberanía y la integridad territorial del país mirando a este nordeste.
En ese marco histórico, abandonada incluso hasta finales del siglo pasado sobre la hipótesis de un conflicto bélico con Brasil, que avanzaría sobre estas tierras en su política expansionista, Misiones libra su lucha y posicionamiento político, histórico y cultural, homenajeando a su actividad productiva, a sus pueblos y sobre todo, a su cultura que generó, gracias a una fusión con pocos precedentes, una tradición propia que también ayuda a enriquecer la identidad nacional argentina, aportando recursos tangibles e intangibles, como la costumbre de la yerba mate, una práctica de amistad exportada al mundo entero, con una ceremonia que celebra la amistad y la convivencia.
Lejos del latiguillo y de las frases hechas, celebramos siempre a nuestra Misiones, la tierra llena de vidas, de colores y de sabores, rica en cultura y en tradición, respetuosa de su diversidad biológica, cultural y sobre todo, étnica.
Misiones es, para propios y extraños, un territorio que se desarrolla en paz.