El titular del Cana 4 de Posadas consideró que la selección de los moderares para los debates presidenciales constituyen una “discriminación activa” en contra de los periodistas que ejercen en las provincias. Carlos Valenzuela adelantó que hará el planteo formal ante la Cámara Nacional Electoral que afirma tiñe sus fallos en favor de los intereses porteños. Reclama a los camaristas mayor transparencia ya que son “garantes de la legalidad democrática”. De todos modos, considera que el debate presidencial es tan inútil como las Paso.

Jueves, 3 de octubre 2019. Carlos Valenzuela salió anoche con los tapones de punta contra la resolución de la Cámara Nacional Electoral que eligió a periodistas de medios porteños para actuar de moderadores en los debates presidenciales que se realizarán el 13 y el 20 de este mes. “Es una discriminación activa” sostuvo el titular del Canal 4 de Posadas e integrante de la Asociación Posadeña de Propietarios de Radios y Canales de Televisión que preside Ariel Sayas.
Manifiestamente molesto por la discriminación, Valenzuela sostuvo que la decisión de los camaristas no es una cuestión menor como pareciera a pesar de relativizar la importancia del debate. Sin mencionar ni decir nada de los periodistas seleccionados, lo que Valenzuela cuestiona es la mirada centralista de los dos integrantes de la CNE que siempre tiñen sus fallos en favor de los intereses porteños.
Es cierto que la resolución que dio a conocer la Justicia Electoral desnuda una impostura ante las críticas que inexorablemente se iban a realizar desde las provincias. La resolución consideró que “los moderadores deben ser conductores de programas periodísticos de canales de televisión de alcance nacional”. Pero seguidamente se cubren con un condicionamiento engañoso al establecer «la necesidad de que haya moderadores oriundos de las provincias argentinas».
Valenzuela no se deja arrastrar por esta falacia porque de lo que se trata es del ejercicio del oficio del periodista. Dónde actúa, no dónde nació.
Anoche en El Club de la Política (programa de Canal 4 Posadas), Valenzuela articuló la elección de los periodistas que ejercen en medios porteños con el rol que tiene la Cámara en el sistema democrático. “Son los garantes del sistema electoral”, remarcó para que se entienda que la resolución es una discriminación activa que “no debería pasar inadvertida”. Destacó que hoy es contra los periodistas que ejercen en las provincias, pero descubre de esa manera el poder de discriminación que tienen los dos camaristas de larga trayectoria. Por eso subraya que sus resoluciones son “producto de una actitud centralista de una Cámara que no presta atención a lo que ocurre más allá de la General Paz”
Aunque entre los seleccionados hay periodistas nacidos en Rosario, Formosa y Santa Fe, lo que cuestiona Valenzuela es la decisión de no haber incluido entre los moderadores a periodistas que estén ejerciendo hoy en Rosario y en Paraná, sedes de la Convención Nacional Constituyentes que en 1994 reformó la Constitución Nacional. “Es alarmante”, enfatizó porque es responsabilidad de la Cámara sostener el sistema democrático.
“El reclamo es legítimo”, le respondió al periodista para acentuar el momento político por el que atraviesa el país con los planteos de recuperar el verdadero federalismo como sostén político y territorial del próximo gobierno. Remarcó Valenzuela que «justamente el tema del federalismo es tenido en cuenta más que engañosamente por la CNE que debería actuar como el espacio que es: “garante de la legalidad de la democracia”.
Como si el episodio de selección de periodistas, digamos estrellas, fuera un gota que rebasa el vaso, Valenzuela insistió en que la Justicia Electoral debe ser independiente que no tenga nada que ver con fallos apropiados o dispuestos a un fin. Más sutilmente, el empresario, conocedor de la jerga del derecho utilizó el término “ad hoc” precisar que debe garantizar transparencia en los mecanismos electorales.
Como se sabe, la Cámara Nacional Electoral tiene competencia en todo el territorio de la Nación. Este Tribunal electoral integra -así- el Poder Judicial de la Nación y es, en nuestro país, la autoridad superior de aplicación de la legislación político-electoral. Se trata de un Tribunal con una naturaleza específica y singular derivada del hecho de que se haya atribuido a la justicia nacional electoral un rol esencial en todo lo relativo a la organización de los procesos electorales. Está a cargo de Santiago Hernán Corcuera y Alberto Ricardo Dalla Via ya que la tercera magistratura no se cubrió después de la muerte de Alberto Munné en 2016. Dalla Via, de tradición radical y fue parte del Consejo de Consolidación de la Democracia unigdo por Raúl Alfonsín. Corcuera, aunque no tiene simpatías partidarias, tiene como antecedente, digamos doctrinario, haber llegado a la Corte Suprema como vocal de Carlos Fayt.
Un debate tan inútil como las PASO
La observación que hace el titular del Cana 4 de Posadas, y su decisión de hacerla llegar a la Cámara y a los partidos políticos la discriminación activa perpetrada, no lo inhiben de hacer pública su opinión sobre el debate presidencial en sí. “El debate es tan inútil como las PASO”, afirmó. Primero destacó que el formato no es de debate sino de ponencias, así que los periodistas seleccionados no harán el papel de moderadores más que tocar el timbre cuando se pasen en el tiempo.
Pero insistió en que lo destacable de esto es que “quienes tienen la responsabilidad de garantizar el proceso electoral en forma transparente y democrática incurren en esta actitud de discriminación al periodismo de las provincias.
“Una cosa no quita la otra”, subrayó ante la requisitoria del conductor del programa. Y volvió a reiterar que la discriminación y la mirada porteña existe aunque el debate sea inútil. Reconoció que es impuesto por una ley que se discutió en el parlamento, pero también las Paso se impusieron por ley y la práctica demuestra la ilusión democrática de esas leyes.
Consideró que el debate presidencial es más propio del siglo pasado, pero hoy el ciudadano ya está informado por múltiples canales y las redes tecnológicas. “No sirve para nada”, remató categóricamente Valenzuela.